Durante la pandemia por el Covid-19, muchas cosas cambiaron, el confinamiento en los hogares fue un primer paso, pero un aspecto importante adoptado por la mayoría de los países fue el cerrar fronteras y en su mayoría procurar la repatriación de conciudadanos y viabilizar el retorno de extranjeros a su tierra natal.
La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días tomó recaudos con los misioneros extranjeros que servían en Bolivia. Es así que el pasado 2 de abril los misioneros de regla (Élderes y Hermanas como se denomina a los jóvenes de entre 19 y 20 años) retornaron a sus hogares en vuelos contratados, tambien volvieron a su hogar una pareja de misioneroas mayores Elder y Hermana Bulok.
- Misionero en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México regresando durante la pandemia de Covid-19
- Misioneros
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Patricio Espinoza y su esposa Francia Moreno - quienes apoyan en los trámites de misioneros extranjeros dijeron: “…fue muy difícil despedir estos jóvenes que con fe y dedicación vinieron a servir y a amar a los bolivianos, apreciamos el servicio de esos misioneros y vimos como el Señor obro milagros, ya que nos encontrábamos en medio de la pandemia por coronavirus. Pese a la difícil situación vimos abrirse los cielos, muchas personas ayudando con el transporte de esos misioneros, creemos que todo viene acompañado del Espíritu y la mano del Señor. Hubo jóvenes que tuvieron que viajar 18 horas para llegar al aeropuerto y el Señor los protegió para que llegaran con bien, 109 misioneros norteamericanos volvieron a sus hogares, y se despidieron cantando el himno Llamados a servir. Siempre los llevaremos en el corazón”.